domingo, 10 de junio de 2012

HAY QUE FICHAR UN NUEVO MINISTRO DE ECONOMÍA


De lo poco que sé de economía entiendo que el ministro del ramo griego impone más que el nuestro. A Venizelos no le puedes venir con los intereses de la deuda o con una prima de riesgo sobreactuada si no hay una mesa grande de por medio. Al canijo de Luis de Guindos se lo puedes decir mascando chicle y con una mano a la espalda. Un ministro de economía tiene la cara que se va ganando con sus manipulaciones, sus robos, sus chulerías y sus bravuconadas. A Luis de Guindos se le ha quedado la cara de frutero de barrio pobre a base de eufemismos. Que si las peras no están podridas, que están perfectas para compota; que si la lechuga no tiene mosquitos, que tiene un estupendo tráfico aéreo... Por eso prefiero al de arriba, si tiene que pelear a hostias con un ministro de economía finlandés o uno holandés. Qué asco de país y qué asco de políticos endémicos. Voy a ver en cuánto está la ficha de Venizelos, que me lo traigo para cuando descendamos a segunda.

EL PRESIDENTE COBARDE CONTRA EL PORTERO SANTO